HISTORIA DE NAVAHERMOSA

EDAD CONTEMPORÁNEA


El oficio de carbonero

 


Recogida de leña.

 

Olivar al pie del castillo de Dos Hermanas. Ruralmedia.es

 


Almazara de aceite. Ruralmedia.es

 


Banda de música de Navahermosa. Año 1890. 
Fuente: Archivo Municipal de Navahermosa

 

Reloj del ayuntamiento.
Fuente: Archivo Municipal de Navahermosa

 


Plaza del ayuntamiento en los años sesenta.
Fuente: Archivo Municipal de Navahermosa
Es en este periodo cuando Navahermosa al igual que los otros pueblos del Señorío Municipal de Toledo consiguen la emancipación municipal y la eliminación de las cargas señoriales como era el impopular tributo del Dozavo y el sometimiento al Fiel del Juzgado de la ciudad de Toledo y sus delegados que duró casi 600 años, hasta la primera mitad del siglo XIX en que el espíritu de la constitución liberal de Cádiz conllevó la eliminación de este Señorío Municipal.
 
Durante los cuales se creó una entidad geográfico-histórica común que son los Montes de Toledo.
Se inicia el siglo XIX (1801) con una Real Provisión del Consejo de Castilla autorizando a cortar leña y fabricar carbón en la dehesa de Valcavero.
La asignación del término municipal a Navahermosa se realiza en 1829 según aparece en el plano topográfico conservado en el Archivo de la Diputación Provincial de Toledo del término señalado al lugar de Navahermosa conforme a la Real Orden de 27 de agosto de 1827, se asignan a Navahermosa 45504 fanegas y en él se representa toda la raña de la Mascura cubierta de monte bajo, siendo los únicos cultivos de olivos existente en esta fecha los de la ladera de la sierra del Cabezo. Además en él se define la Dehesa Boyal ubicada en la zona entre la Nava y el camino de Menasalbas.
 
En este periodo se llevaron a cabo las Desamortizaciones que habían comenzado tímidamente a finales del siglo XVIII con Carlos IV, pero que en nuestra comarca tienen gran importancia en la primera mitad del siglo XIX con la desamortización de Mendizábal en 1836 pero sobre todo la Desamortización civil de Madoz en el año 1855 que afectó a los bienes municipales. Los bienes desamortizados en Navahermosa entre 1837 y 1855 fueron de 2507 fanegas de fincas rústicas.
 
Las guerras del siglo afectaron al municipio. Durante la Guerra de la Independencia se produjo el saqueo de Navahermosa por parte del ejército francés, al ser refugio de guerrilleros.
 
Las guerras carlistas del siglo XIX tuvieron también su presencia en Navahermosa. Durante las tres guerras ocurridas a lo largo del siglo XIX hubo varios episodios de enfrentamiento con los carlistas, entre ellos los ocurridos en mayo de 1837 donde la Milicia Nacional rechazó a los partidarios del carlismo mediante una fortificación realizada en el barrio de la Raña. También el día 18 de marzo de 1873 en las terceras Guerras Carlistas queda reflejado en las Actas Municipales del Archivo Municipal de Navahermosa una sesión extraordinaria para la vigilancia y defensa de la población ante la invasión sufrida por el Partido Judicial por una partida carlista.
 
Además se unió la nueva aparición del bandolerismo en la comarca durante la segunda mitad del siglo XIX, favorecido por el entorno geográfico, el periodo de guerras carlistas, las desigualdades sociales o las crisis socioeconómicas. La revolución de 1868, que finalizó con la caída de Isabel II, también tuvo su reflejo en la localidad, conservándose en el Archivo Municipal las Sesiones de la Junta Local Revolucionaria compuesta por funcionarios de la administración del Partido Judicial.
 
Tenemos además de las fuentes archivísticas otras para el siglo XIX como es el MADOZ. Los datos demográficos de Navahermosa en el siglo XIX , eran en 1825 de 661 vecinos, que equivalían a 1604 habitantes y en el año 1845 había 710 vecinos correspondiente con 2151 habitantes, además las casas existentes eran 706.
 
El núcleo urbano de Navahermosa se repartía en 41 calles, de las cuales 9 eran anchas y el resto estrechas y empedradas. Además se específica que las Casas Consistoriales son de buena traza de estilo toledano y construidas en 1833.
 
La economía de Navahermosa en el siglo XIX supuso aumentar las zonas roturadas ganando terreno las tierras de labor al monte sobre todo a finales de siglo. Destinándose a sembrar además de cereal, vid y olivos. Es en este periodo cuando se realizan las grandes roturaciones de monte de zonas como la raña de la Mascura para plantar junto a viñas las grandes extensiones de olivar existentes hoy.
 
El término medía 43404 fanegas de ellas 200 se destinaban a cereal, 500 a olivar y 600 al viñedo.
La actividad del carboneo empleaba a casi la mitad del vecindario. La actividad industrial en Navahermosa a mediados del siglo XIX consistía en cuatro talleres de tejidos de lana, una fábrica de curtidos, además de dos molinos harineros.
 
En las Actas Municipales del 3 de agosto de 1873 se tomó el acuerdo de realizar una feria de ganados coincidiendo con las fiestas de agosto.
La capitalidad de los Montes de Toledo a mediados del siglo XIX recae en Navahermosa tanto en el ámbito civil, judicial y eclesiástico. En el año 1835 Navahermosa ha solicitado y ha obtenido ser la cabeza de Partido Judicial, con juez de entrada y una jurisdicción que comprende los siguientes lugares y villas: Cuerva, Gálvez, Hontanar, Menasalbas, Navahermosa, Los Navalmorales, Los Navalucillos, Noez, Pulgar, San Martín de Montalbán, San Martín de Pusa, Santa Ana de Pusa, San Pablo de Los Montes, Torrecilla de la Jara, Totanés, Ventas con Peña Aguilera y Villarejo de Montalbán. En los años setenta del siglo XX el Partido Judicial de Navahermosa se suprimió, conservando el Registro de la Propiedad y la Notaria.
 
Durante la segunda mitad del siglo XIX se crea el Arciprestazgo de Navahermosa, siendo capital eclesiástica de buena parte de la comarca de los Montes. La causa fue el deseo de los Gobiernos de la Nación de ubicar los cabeza de Arciprestazgos, en las cabeceras de los Partidos Judiciales.
En el siglo XX demográficamente Navahermosa alcanza los 3635 habitantes en el año 1900, diez años después ya sobrepasa los 4000 habitantes, alcanzando en el año 1950 los 4946 habitantes.
El nuevo reloj de la villa de Navahermosa se inaugura el día 6 de marzo de 1904 según acta de inauguración del Ayuntamiento conservada en el Archivo Municipal.
En el año 1918 se fundó el Sindicato Católico Agrícola de Navahermosa el cual llegó a contar en el año 1930 con 900 socios.
En el año 1909 la educación en la localidad se impartía en una escuela de niños situada en la Plazuela de la Iglesia, en la cuál estaban matriculados 165 alumnos de los cuales 115 podían asistir diariamente. La escuela de niñas estaba en la calle Ancha teniendo matriculadas 180 alumnas de las cuales podían asistir diariamente 130.
 
En el año 1923 se hace cesión por el Ayuntamiento del solar asignado para la construcción del edificio de las escuelas públicas situado en la calle del Arroyo.
 
En 1925 se constituyó la llamada Junta de intelectuales de la localidad para establecer clases de adultos y dar enseñanza gratuita de lectura y escritura a los jóvenes a partir de 15 años. . También en los años treinta funcionó una imprenta de pedal.
 
La Guerra Civil Española y la posguerra supusieron un retroceso en el avance económico y social, en el cuál se sufrió el conflicto civil y el exilio.
En cuanto a la economía decir que hasta los años setenta sigue siendo mayoritariamente agrícola con predominio del olivar y los cereales.
Si bien la actividad industrial en la primera mitad del siglo XX ya era incipiente. Aparecen las almazaras industriales para transformar las aceitunas en aceite, llegando a contarse con siete fábricas de aceite y una de orujo. Aparecen las explotaciones industriales del corcho o la explotación a escala industrial de la cantería.
 
La ganadería en los años cincuenta tiene una cabaña lanar de 2335, el ganado caballar es de 259, el asnal es de 147, las mulas 325, el vacuno 178 y el cabrío 1820 cabezas.
 
En industria Navahermosa llegó a contar con 3 almazaras o molinos de aceite de oliva en la década de los cincuenta.
 
La emigración de los navahermoseños esencialmente entre los años 50 y 70 a otras regiones españolas y a diversos países centroeuropeos conllevó que desde el año 1960 en que nuestro pueblo llega a su máximo poblacional con 4985 habitantes hasta los años ochenta con 3731 habitantes la población fuera decreciente. Esta dinámica ha variado en los últimos años, en la actualidad la población se encuentra en un crecimiento demográfico sobrepasando los 4200 habitantes en la actualidad.
Las causas del desarrollo son heterogéneas. Podemos señalar el desarrollo industrial y del sector servicios alcanzados desde los años 70 en actividades como: la fabricación de muebles, la explotación del corcho, del granito, la construcción, la confección o la cerrajería. También ha tenido que ver la diversificación de actividades y producciones, así como a la explotación olivarera, con una extensión actual de 3915 hectáreas dedicadas a olivar, que supone un 30 por cien de la superficie del término municipal. Este cambio originado con la Democracia desde finales de los años setenta hasta hoy no ha sido solamente demográfico sino también es visible en su fisonomía, el desarrollo de diversas actividades en los sectores económicos, el bienestar socio-económico, formativo, la mecanización de los trabajos o el desarrollo de los servicios.